Conmemoración de Yom Hashoah, Yom Hazikaron y celebración de Yom Haatzmaut en Na’amat

1024 575 Federación Femenina de la Comunidad Judía de México
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El miércoles 14 de abril en Na’amat compartimos una mañana de nostalgia y celebración, ya que tuvimos el honor de compartir la experiencia de lo que vivió la sobreviviente Gyorgyi Schmidt durante el Holocausto con su plática titulada “Mi Infancia Truncada”.

La Sra. Gyorgyi nació en Hungría Budapest, en 1942, es hija de sobrevivientes del Holocausto.

El 19 de Marzo de 1944, los alemanes invadieron Budapest y de ese tiempo hasta el 8 de mayo de 1945 los nazis asesinaron a 600,000 de los 800,000 judíos  que vivieron en de Hungría.

La Sra. Gyorgyi tenía un año y medio cuando entraron los nazis, el 19 de marzo, sus padres rentaron un departamento en un pueblo cercano a Budapest para pasar el tiempo de guerra, sin pensar que esta iba a durar tanto. Al volver del pueblo vieron que había mucha gente en la estación del tren y les contaron que se estaban llevando a los judíos. Ellos llegaron a su casa y ya los estaban esperando los soldados para llevarse a su papá a un campo de trabajo.  Cada día los alemanes se llevaban a más judíos, primero a una fábrica de ladrillos y de ahí a Viena y/o Bergen Belsen.

El papa de la Sra. Gyorgyi se llamaba Moishe y tenía un taller de pieles finas. Su clientela eran las esposas de los señores del parlamento. Un hombre bueno y carismático, conocido por la comunidad religiosa de Hungría. El 8 de mayo de 1945, lo trasladaron de Dachau, y mientras su mamá buscaba la forma de conseguir papeles para sacarlo de ahí, un soldado le disparó y lo mató.

La Sra. Gyorgyi, su mamá y hermanos no entraron al Gueto porque tenía un permiso especial para entrar a la casa  de asilo de Raoul Wallenberg (un justo entre las naciones). Un día entraron nazis a la casa a buscar una radio que estaba prohibida tener. Sacaron a todos de la casa al campo y bombardearon esas casas. Ellos caminaron 5 km para llegar al gueto, bajo malas condiciones en el frío y con enfermedades. Su mamá encontró un certificado para poder entrar a otra casa protegida. Su mamá cambió un abrigo de mink por comida y aspirinas y se salvó estando cerca de la explosión de una bomba. Sin embargo, su mamá lucho siempre por sacarlos adelante.

Al finalizar la guerra la Sra. Gyorgyi estuvo en cama por dos meses debido a una meningitis y estuvo muy desnutrida.

Un hermano de su mamá les consiguió papeles para llegar a México y llegaron aquí en diciembre de 1947, ella tenía 5 años.

Ella dice que los hijos de sobrevivientes son hijos del silencio. No se hablaba del tema y no había mucha comunicación. Le costó trabajo adaptarse en el país.

Se casó a los 17 años, quedó viuda hace 13 años, tiene hijos, nietos y bisnietos.

Ella dice que debemos luchar por erradicar el odio en nuestros corazones, no debemos quedar en silencio ante las injusticias ni permitir que se vuelva a hacer un holocausto en cualquier parte del mundo.

Para finalizar nos leyó un poema que ella hizo hace muchos años titulado “Tres Estaciones”.

Todas las compañeras de Na’amat estamos muy agradecidas con la Sra. Gyorgyi Schmidt  por contarnos su historia, por demostrarnos su fortaleza y las ganas de salir adelante para sobrevivir en esa época tan terrible y por ayudarnos a que más gente sepa lo que pasó y que la historia no se repita nunca jamás.

Para conmemorar Yom Hazikarón, nuestra compañera Clarisse Porteny nos dio una explicación, para comenzar prendimos una vela, guardando un minuto de silencio por las víctimas caídas en actos terroristas y en guerras de Israel. Después, ella  nos contó que este día se promulgó como ley en 1963.

Desde 1949 y 1950, los dos primeros años después de la declaración del Estado de Israel,  se llevaron a cabo servicios conmemorativos para los soldados caídos en la guerra de Independencia en 1948. Después de esto, surgió una necesidad por parte de las familias de estos soldados de establecer un día conmemorativo, que fuera separado del día de la celebración de Independencia Nacional. El primer ministro David Ben- Gurión estableció un Consejo público en 1951 para la conmemoración de los soldados caídos y este consejo estableció el 4 de Iyar como el día del recuerdo para los soldados caídos en guerras de Israel, Yom Hazikarón.

Para este 2021,  el número de soldados caídos es de 23,928. En Israel el día comienza con una sirena que se escucha en todo el país durante un minuto, y en el todo el país detiene sus actividades y permanecen en silencio. Los establecimientos de ocio se cierran para mantener la solemnidad, y los nombres y rangos de cada soldado fallecido se muestran en un programa de televisión durante las 24 horas.  Al día siguiente, a las 11AM,  una sirena suena por dos minutos marcando la apertura de las ceremonias conmemorativas oficiales públicas y privadas en cada cementerio donde están enterrados los soldados. En todos los hogares se prenden velas y las banderas se bajan a media asta.

Ese día a las 7PM, en  una ceremonia oficial en el Monte Herzl, se marca el fin del día y el  comienzo de Yom Haatzmaut.

La vida de cada persona es un valor sagrado en el judaísmo, por lo tanto, es nuestro deber como judíos, recordar a todos y cada uno de aquellos que fallecieron entregando la suya luchando por un bien mayor y por un estado propio para su pueblo.

Asumamos el compromiso de honrar la memoria de  todos aquellos que han sido víctimas del odio y la discriminación. Para cambiar el mundo se empieza ahora y acá y eso está en nosotros.

Posteriormente, nuestra compañera Sara Nates nos habló de Yom Haatzmaut.

Yom Hashoah, Yom Hazikarón y Yom Haatzmaut están dadas en el calendario judío tan solo con 8 días de diferencia. Antes de 75 años no conmemorábamos ninguna de estas 3 fechas. Un grupo de antisemitas y negacionistas opinan que esto fue solo un invento de los judíos para obtener el Estado de Israel, sin embargo nosotros sabemos la verdad. Los judíos siempre hemos anhelado el regreso a nuestra tierra prometida, y mucho antes de la Shoah hemos sido víctimas de expulsiones, persecuciones y Progromos. Durante 2000 años anhelábamos regresar a nuestra tierra ancestral, pero fue hasta finales del siglo 19 que Teodoro Herzl se dio cuenta de la importancia que era para el pueblo judío tener un lugar propio, y así escribió su libros Altneuland y El estado Judío, para después llevar a cabo el Primer Congreso Sionista y dar a conocer al mundo y a las comunidades judías de Europa la importancia de sembrar la idea de tener  un estado judío propio.

A raíz de la Shoah se dio una fuerte migración de judíos a Israel, antes de eso ya habían llegado miles de judíos que habían sido perseguidos por Progroms de Rusia, Polonia e Inglaterra.

La relación de estas fechas es que Yom Hashoah es el precio que pagamos por no tener un Estado judío y sin embargo,  Yom Hazikarón es el costo que tenemos que estar pagando constantemente por tener un Estado Judío.

Debemos recordar siempre que las raíces del Estado de Israel las tenemos gracias al sacrificio y dedicación de los soldados. Solo recordando los retos y desafíos por los que ha pasado el Estado de Israel podemos entender la importancia del significado de festejar Yom Haatzmaut.

No es solo un día en el que se celebra la independencia como en los demás países, para nosotros es el renacimiento de nuestra libertad, de nuestra patria histórica y ancestral después de 2000 años en la diáspora, y así el 5 de Iyar o 14 de mayo de 1948, David Ben-Gurión llamó a su equipo para leer el acta de Independencia y declarar el estado democrático del estado de Israel. Todo el mundo escuchó esto por la radio y se puso a bailar y cantar en las calles de la misma manera que se hace hoy 73 años después.

En ese entonces el nuevo estado contaba con 600,000 habitantes, el día de hoy, Israel tiene poco más de 8 millones de habitantes, de los cuales 1.5 millones son sobrevivientes del Holocausto y desposeídos de los países árabes.

Israel es un país con una de las tecnologías más avanzadas del mundo, con educación de primera, arte, medicina, agricultura y tratamiento del agua, con un alto crecimiento económico. Es un país con libertad, igualdad y justicia, un país de derechos.

Debemos sentirnos orgullosos de pertenecer!!

Durante 2,000 años siempre los judíos rezaban por tener un país propio, ahora nosotras podemos decir con toda seguridad: L’Shana Haba’ah B’Yerushalaim.

Terminamos esta emotiva plática con un video de Yom Haatzmaut y todas cantamos el Hatikva con mucha emoción.

Agradecemos mucho a todas las compañeras que nos acompañaron en este día tan especial, a la Sra. Gyorgyi Schmidt por transmitir su historia para que no sea olvidada, y a nuestras compañeras Clarisse Porteny y Sara Nates por sus presentaciones tan completas, claras y llenas de información valiosa.

 

 

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