Hoy en día, la mujer sigue sin ocupar muchos puestos de trabajo o realizar actividades que por tradición han sido “cosa de hombres”. Mucho se ha avanzado y en cada rubro se ha comprobado que la calidad deportiva, intelectual, y de capacidad para desempeñar cualquier trabajo es viable para todas. Claro que no todo podemos hacer, como tampoco todos los hombres pueden hacerlo todo. Un hombre que le teme a las alturas no podrá ser escalador o limpiador de vidrios en un rascacielos. Pero lo que nos debe quedar claro es que en cualquier profesión, deporte, puesto de gerencia o político, las mujeres podemos aspirar a conseguir aquello por lo que soñamos.
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